Los sueños, ya sean reales o irreales, juegan un papel importante en nuestras vidas. Pueden afectar nuestras emociones, comportamientos e incluso las decisiones que tomamos al despertar.
Los sueños reales, como los sueños de procesamiento, pueden ayudarnos a procesar y lidiar con las emociones y experiencias cotidianas. Pueden ayudarnos a comprender nuestros sentimientos y a enfrentar situaciones difíciles.
Los sueños irreales, como los sueños surrealistas y de fantasía, pueden ser una forma de escapismo de la realidad. Pueden permitirnos experimentar cosas que no podemos en la vida real o darnos un descanso de nuestras preocupaciones y tensiones cotidianas.